Honduras, una nación rica en diversidad cultural y étnica, es hogar de diversas comunidades indígenas y afrodescendientes que han enfrentado desafíos abrumadores durante generaciones. Estas comunidades, a menudo marginadas y olvidadas, han sufrido la indiferencia de las autoridades, la pérdida de sus tierras ancestrales, la extrema pobreza y limitaciones en el acceso a la educación.

En medio de estas adversidades, una alianza poderosa entre AHDESA y Trees Water and People (TWP) está determinada a brindar su aporte para el mejoramiento de la calidad de vida de estas poblaciones, especialmente la comunidad indígena Lenca, a través la introducción de la Estufa Justa 3D, que está generando beneficios al bienestar, la economía, la salud y el ambiente, así como el fortalecimiento de la capacidad de sus líderes locales y el enfoque de género.

La Difícil situación de las Comunidades Indígenas en Honduras

Las comunidades indígenas en Honduras han enfrentado décadas de marginación y desatención por parte de las autoridades. Sus tierras ancestrales, que son fundamentales para su cultura y subsistencia, han sido objeto de expropiación y explotación, dejando a estas comunidades en condiciones desfavorables.

En la lucha por la autonomía y los derechos Indígenas, la comunidad lenca, al igual que otras comunidades indígenas en Honduras, ha estado luchando por el reconocimiento de sus derechos territoriales y culturales, así como por su autonomía. Han participado en protestas y movimientos para defender sus tierras y su patrimonio cultural.

Hoy, la población Lenca estimada llega a los 600.000 habitantes aproximadamente (según el Banco Interamericano de Desarrollo) Sus comunidades, localizadas en tierras altas poco fértiles, están sometidas a un continuo proceso de asimilación cultural por parte de los ladinos, incluyendo la pérdida de su lengua y buena parte de sus rasgos y costumbres propias debido a la discriminación, directa e indirecta, la vulneración de sus derechos y la privatización de sus territorios.

Las comunidades lenca a menudo se ven afectadas por proyectos de desarrollo que tienen un impacto negativo en el medio ambiente y en sus formas de vida tradicionales. Esto incluye proyectos de represas hidroeléctricas y minería que pueden degradar sus tierras y recursos naturales.

AHDESA y TWP: Un Rayo de Esperanza

En medio de esta realidad desafiante, AHDESA y TWP han unido fuerzas para brindar esperanza y soluciones sostenibles. El proyecto de Estufas Justa 3D es parte de un compromiso más amplio con estas comunidades. No solo están mejorando la salud y la economía de las familias mediante la introducción de estufas eficientes, también están conservando el medio ambiente, reduciendo la huella de carbono, a la vez se trabaja en la preservación de sus  tradiciones culturales.

Simplicia Méndez, una ama de casa de mediana edad, miembro de la comunidad  indígena del Cacao, en Intibucá, comparte su testimonio con entusiasmo: “Yo me siento muy agradecida por las estufas que nos construyeron. Ahora ahorramos mucha leña, cocinamos con pedacitos de madera, la tortilla, los frijolitos, el cafecito, mi estufita calienta tan rápido, tanto que tengo que cuidar que no se me queme la comida. Antes era mucho gasto de dinero comprando leña. Ahora sin humos, yo… desde hace meses, no me enfermo. Antes solo enfermaba pasaba debo, siempre con mucha tos, dolor de cabeza y los ojos rojitos, ahora ya no me enfermo, paso contenta”.

Un Futuro Más Prometedor

A medida que AHDESA y TWP continúan trabajando con estas comunidades, queda claro que están haciendo frente al abandono y la marginación que sufren estas comunidades. Su enfoque en soluciones sostenibles está arrojando luz sobre un futuro más prometedor para los pueblos indígenas de Honduras. Esta colaboración está contribuyendo a la transformación de estas comunidades, donde el empoderamiento y la resiliencia triunfan sobre la adversidad.